Anteproyecto de parque-dique en la playa de La Pineda

Primera infraestrucutra portuaria resiliente en España integrada con el paisaje y dotada de uso social

Fecha
2025
Lugar
La Pineda, Vila-seca (Catalunya)
País
España
Autoría
LANDLAB, laboratorio de paisajes (Jordi Miró, Miriam García) y IH Cantabria (Raúl Medina)
Equipo
Anna Díez, Jeroni Mach, Pere Marieges, Laura Oliver
Colaboradores
IHCantabria (Verónica Cánovas, Raúl Medina, César Vidal)
Promotor
Autoritat Portuària de Tarragona
Alcance
Anteproyecto

En los últimos años la Autoridad Portuaria de Tarragona ha estado trabajando en colaboración con distintas administraciones públicas y entidades en la búsqueda de una solución emblemática para la adaptación del frente litoral de La Pineda al cambio climático.

Esa solución se desea que sea sostenible, integre los planes de desarrollo de la Cuidad y del Puerto previstos en los próximos años y que trate de satisfacer todas las necesidades del entorno desde el punto de vista físico, económico, medioambiental y social mediante el debate y la toma de decisiones de forma conjunta de los distintos actores.

En este sentido, desde abril de 2021, los diferentes organismos e instituciones han estado colaborando con la Autoridad Portuaria, IHCantabria y LANDLAB en la conceptualización de una solución al problema de estabilización y restauración de La Pineda acorde con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Esa conceptualización se presentó en octubre de 2021 y se propusieron distintas medidas de compensación por el desarrollo del Plan Director de Infraestructuras y la adaptación al cambio climático considerando los planes de desarrollo previstos.

La solución adoptada plantea la introducción de nuevos hábitats y paisajes, generando así una rica diversidad ambiental y paisajística de uso social. Así, en la parte más cercana a la ciudad, se propone un espacio/plaza de acceso que sirve como punto de unión con el aparcamiento y como articulación con el paseo marítimo. Para ello se propone acondicionar el parque existente en el encuentro con la Calle Amadeu Vives con el Paseo marítimo, generando un espacio previo al espacio natural restaurado de Els Prats d’Albinyana y a un nuevo recorrido por la playa, rodeando la laguna grande y pequeña, hasta el encuentro con el parque-dique sobre la escollera del contradique.

Como continuación de la zona que comprende la restauración de Els Prats d’Albinyana, se propone un paisaje de transición entre la laguna, y los humedales y el mar. Este paisaje se caracteriza por un conjunto de lagunas que complementa la propuesta en el proyecto de restauración, así como también un cordón dunar, que se puede recorrer a través de las pasarelas de madera previamente descritas. Este paisaje diverso y naturalizado de playa, lagunas y dunas supone un nuevo atractivo en el conjunto de la playa de La Pineda y dota al conjunto del frente litoral de continuidad y coherencia. Su creación, sin duda, quitará presión e intensidad de uso a la zona restaurada, que se convertirá gracias a este proyecto en el auténtico corazón de un sistema ambiental y paisajístico mucho más amplio.

El punto de arranque del contradique, que también es el punto final del camino de límite de Els Prats d’Albinyana, se transforma en el acceso al parque-dique con el objetivo de recuperar los hábitats perdidos de esta zona del litoral. En este caso se plantea una gradación desde una zona de bosquete litoral hasta el ambiente de dunas y playa.
Este parque-dique acondiciona paisajísticamente la diferencia de cotas entre el paseo superior del contradique y la playa mediante un talud vegetado que alberga espacios de paseo, estancia y miradores a la sombra. De este modo se evita el impacto visual que la escollera del contradique produciría, al mismo tiempo que se genera un paisaje de transición entre la ciudad, Els Prats d’Albinyana y el nuevo contradique. Un lugar de esparcimiento con distintas especies arbustivas y arbóreas (del tipo tamarix, tipuana tipu, pinus pinea, entre otras) que proporcionen sombra a los usuarios y generen lugares de estancia.

A partir de la plaza del Mar, auténtico centro de uso social del conjunto, el paseo y el carril ciclable llegan hasta el final del contradique, siendo prácticamente inviable contar con vegetación, por ello en esta parte se persigue el diseño de una escollera y paredes vivas capaces de albergar hábitats submarinos. Con esta misma intención y la de proteger el uso social del contradique se mantiene, ya en el mar parte del contradique existente (convertido ahora en arrecife gracias al uso de piezas de hormigón ecológico). Así, con esta operación se convierte la actual estructura en un elemento con vida submarina, dotando la actuación de un carácter más sostenible y aumentando la resiliencia del conjunto del frente litoral.