Adaptación y Resiliencia

La adaptación al cambio climático es esencial para garantizar que nuestras ciudades y edificaciones sean resilientes. Esto implica un conocimiento profundo de los sistemas y de la evolución de las variables climáticas, así como el uso de tecnologías innovadoras y la implementación de medidas basadas en la naturaleza asegurando así que las comunidades puedan recuperarse y prosperar en un entorno cambiante. Así, cada proyecto se convierte en un laboratorio de ideas, desafiando los límites del diseño para crear espacios y lugares más resilientes y humanos.